domingo, 30 de junio de 2013

Tajada

Disiento con vos
nadie nace para otro
no existen esos rompecabezas.

El amor funde los cuerpos y las almas con trabajo.
Es entonces cuando uno olvida que su boca no es tu boca,
 ni sus manos mis manos
casi llegamos a cosificar, a poseer.
Y ahí la enfermedad, cuando la cosa se rebela con nosotros. Sus dueños.

Miserable cosa, olvida que por ella abandonamos 
el castillo de naipes
el estudio de las mariposas
y el cultivo de tulipanes

He ahí que la boca dice palabras no deseadas
las manos hacen groseros gestos de despedida
y nosotros totalmente enjaquecados 
volvemos a nuestro nicho donde éramos tan felices,
para encontrarlo sin luz
los naipes abandonados al viento
aterrizados y empolvados
las alas ya sin vida de las mariposas grises
y sus arabescos 
como caras de espanto
y de los tulipanes resta 
una tierra seca donde no volverá a haber vida.

Y como no llorar
sentimos media boca
insuficiente para gritar
y nuestras manos
no sirven para empezar de nuevo.

Es evidente
cuando algo se funde y se separa
la tajada nunca será la misma.

martes, 18 de junio de 2013

dice que no sabe del miedo de la muerte del amor
dice que tiene miedo de la muerte del amor
dice que el amor es muerte es miedo
dice que la muerte es miedo es amor
dice que no sabe

A. Pizarnik

miércoles, 5 de junio de 2013

Te dí mi alma
        como un árbol

Entonces la talaste
  le arrancaste la raíz
  y alteraste sus hojas

Te dí mi alma
        como hoja

Entonces garabateaste
  la arrugaste
  y la quemaste

Te dí mi alma
        como ceniza

Entonces la soplaste
  la aplastaste
    y la tiraste

Te dí mi alma
        como polvo

Entonces la aspiraste
  la fumaste
  y reíste satisfecha.